Hoy, 1 de Mayo, millones de trabajadores y trabajadoras celebramos en casi todo el mundo la Fiesta del Trabajo. En España cientos de miles de personas, convocadas, por los sindicatos reivindicamos el pleno empleo y la igualdad.
Pleno empleo, pero también a la vez, de mayor calidad, con menor precariedad y siniestralidad laboral y mayor igualdad entre mujeres y hombres en materia de igualdad de oportunidades y de retribuciones, tal como recogen los manifiestos del PSOE y la UGT. accesibles desde esta página en UGT y en PSOE .
Creo un deber de gratitud, rendir un humilde homenaje a las mujeres y los hombres que a lo largo de 126 años lucharon en Asturias por los derechos de todos nosotros.
Nada mejor para ello que recurrir al libro "Memorias de un octogenario" de Manuel Vigil Montoto, editado por la Fundación José Barreiro, y tomar prestado uno de sus fragmentos que reseño a continuación:
La fecha del 1º de Mayo declarada Fiesta del Trabajo en el Congreso Internacional Socialista, celebrado en París en el año 1889, se celebro en Asturias, según mis datos, por primera vez en 1891.
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"El 22 de abril del citado año se reunieron las sociedades obreras de Oviedo para determinar la forma de celebrar el 1º de Mayo y reclamar al municipio que declare fiesta ese día. La comisión para organizar los actos del 1º de Mayo, la formaron : por la Sociedad de canteros, Manuel Fuentes, Eduardo Álvarez y José Sánchez; por la de moldeadores Serapio Rodriguez, Rufino Undargaray y Marcelino Landa; por la de zapateros, Perfecto García, José García y Nicolás del Truébano.
Del mitin celebrado el 1º de Mayo se cursó este telegrama a "El Socialista:". "Acaba celebrarse mitin teatro Fontán. Orden completo. Mucho entusiasmo. Asistieron 200 obreras y 2000 trabajadores. Remitimos acuerdos. La Comisión" .
El mitin fue presidido por Serapio Rodriguez , e hicieron uso de la palabra José Sánchez, Rufino Urdangaray, Nepomuceno Martínez, Marcelino Landa, Manuel Fuentes y Manuel Riello.
El paro en el trabajo fue completo.
Al calor de los actos del 1º de Mayo de 1891 los sastres alcanzaron que la jornada no excediera de 10 horas pero al llegar el invierno algunos patronos quebrantaron el compromiso alargando la jornada, otros apelaron a la astucia para que dejaran la Sociedad de Resistencia. La firmeza de los obreros hizo flaquear a los patronos y el trabajo se siguió sin perder ni un día.
Miremos adelante.
Los mejores tiempos están por venir.
1 comentario:
Pues tal y como están las cosas, permiteme dudar de ese aserto de que lo mejor está por llegar.
En el tema del empleo, lamentablemente, hoy no estamos mejor que hace 20 años, así que no se porqué piensas que dentro de unos años estaremos mejor que ahora.
Y que conste que no lo digo por mí, que yo a nivel personal no tengo queja, yo soy de la tribu de los privilegiados
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